Día 7, ya llevamos una semana de confinamiento por coronavirus. ¿Cómo estáis? Nosotros sin síntomas y de momento cuerdos.
No sé vosotros pero lo de llevar una rutina estando 24/7 en una casa, es jarto complicado eh?
Os cuento más o menos mi manera de llevarlo, os recuerdo que estoy sola con dos adolescentes y dos perros (afortunada que puedo bajar a sacarlos ¿verdad?).
Me levanto yo primero, en cuanto abro el ojo, soy incapaz de seguir en la cama, me pongo a dar vueltas en la cabeza a todo lo que tengo que hacer y salto de la cama… ahora en serio, en cuanto abro el ojo si que soy incapaz de dormir de nuevo, empiezo a dar vueltas, me duele la espalda y total, me levanto y me tomo mi café bomba en silencio con la compañía de los perros. Es mi momento.
Después se suele levantar el pequeño, arrastrando los pies llega hasta el salón y se deja caer en el sofá. Desayuna, se toma su tiempo, total, ¿alguien tiene prisa? nosotros no…
Después de desayunar toca deberes….
Malditos deberes de confinamiento
¿En serio? ¿de verdad son necesarios tantos deberes? Me da lasensación de quien está yendo al colegio soy yo, madre del amor hermoso. Que yo si estudio, estudio dientes, no la Guerra Civil, los ejercicios de matemáticas (soy de letrasssss) o la cantidad de actividades varias que le están mandando.
Y ni qué decir tiene, esos mails de los profesores, dando ánimos (JA) y comentando que la semana que viene pasarán el planing con el resto de ejercicios.
Basta por favor.
De verdad, creo que es lo más duro que me está pasando, explicar a mi hijo al que le cuesta comprender lo que lee, un problema de matemáticas o la Guerra Civil Española.
No valgo para el Homeschooling. Lo he decidido hace 3 días.
Total, entre deberes de matemáticas y sociales, la mayor se levanta, bueno mejor dicho la despierto y bajo a los perros.
5 minutos, de verdad, los pobres están en casa que ya no saben qué hacer. Ellos también están sufriendo todo esto y es que tú me dirás.
Seguimos con los deberes y total que nos plantamos en la hora de la comida. Comemos.
Confinamiento por coronavirus o día de la marmota

Rato libre en los que se ponen a jugar entre ellos a Roblox. Me gusta oírles reírse juntos. No les molesto, que estén el rato que quieran jugando a eso.
Intentamos hacer algo de deporte, baile o ¡algo!
Ayer intentamos bailar alguna coreo sencilla, nos echamos unas risas con mi coordinación mula, qué le vamos a hacer. Hoy tocó gimnasia: abdominales, plancha, elíptica, circuito de pelota para el pequeño.
A las 20:00 toca salir a la terraza a aplaudir, escuchar la fiesta que organizan con música y luces en la urbanización y a saludar con las linternas de los móviles a los de los edificios de enfrente. Socializar en estos tiempos vaya…
Hacemos tiempo, duchas, aburrirse, ver tv o bueno, ponerla de fondo y miara los móviles.
Cena y poco más, bueno, yo saco a los perros de nuevo en torno a las 23:30 que no me encuentro con nadie y a casa.
Cuando nos viene el sueño, a dormir y vuelta el día de la marmota.
Y esa es nuestra rutina, nuestro diario de confinamiento por coronavirus.
El fin de semana voy a ver si organizo algo distinto con ellos, pero es taaaan complicado.
¿Cómo lo estáis llevando vosotros?
Cuidaros mucho
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1 comentario en «Diario de confinamiento por coronavirus»
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